Pequeños pasos, grandes cambios
La sonrisa de Jackner es permanente, siempre está contento con una sonrisa juguetona y traviesa como todos los niños, ya no está triste mirando a los otros niños desde el pasillo de la casa, ahora sale y se integra, juega y habla con los otros niños de su edad, los introduce en su coche por lo que llama al andador y siempre lleva en el cuello un silbato que usa para llamar a los otros niños a jugar cuando son las 3:00 pm.
Jacker Omely Ricardo – 6 años, beneficiario de un andador ortopédico.
Se le consultó a Ely Ricardo Narciso (Madre) si se podía publicar la historia y estuvo de acuerdo, ella también fue la que dio la entrevista.
Mi hijo Jackner ha cambiado mucho en cuanto a su situación emocional, con el andador es más independiente, puede moverse por el patio y dentro de la casa, y ahora puede dar hasta 30 pasos sin el andador, cuando antes de tener el andador ortopédico sólo podía dar 5 pasos y sentarse.
La sonrisa de Jackner es permanente, siempre está contento con una sonrisa juguetona y traviesa como todos los niños, ya no está triste mirando a los otros niños desde el pasillo de la casa, ahora sale y se integra, juega y habla con los otros niños de su edad, los introduce en su coche por lo que llama al andador y siempre lleva en el cuello y un silbato que silba para llamar a los otros niños a jugar cuando son las 3:00 pm.
Nuestra casa fue donada por la organización de desarrollo regional, y decidimos diseñar una rampa para que Jackner pueda subir y bajar con cuidado porque queremos enseñarle a ser autosuficiente. Consideramos que el apoyo de ASB ha cambiado la vida de nuestro hijo Jackner y la nuestra también, como padres también estamos contentos porque nuestro hijo es feliz, la alimentación fue clave porque fue en los momentos en que dependíamos mucho más de la ayuda del líder de nuestra comunidad que todas las tardes cocinaba para dar comida a nuestros niños de la zona, por lo que la comida recibida la supimos administrar bien.
Para continuar con nuestras vidas, hemos logrado establecer una pequeña tienda de abarrotes, nos estamos preparando para ir al mar, hay mucho que vivir y no parar así que seguiremos con nuestras vidas viendo crecer a nuestro hijo recuperándose poco a poco de lo que hemos vivido.