Belén Hernández Peralta, pequeña empresaria de Chiquimula, Guatemala, cuyo emprendimiento es apoyado por el programa SOL

Cuando Belén Hernández Peralta nació, su pronóstico de vida era de tres días máximo. Esta conclusión se sustentó en un diagnóstico de espina bífida más complicaciones de salud varias que surgieron posterior al parto. Sin embargo, treintaiún años después, la vida de Belén transcurre entre sus estudios, su activismo por los derechos humanos de las personas con discapacidad y su emprendimiento.

Belén vive en la ciudad de Chiquimula, cabecera municipal del departamento del mismo nombre, ubicada a 170 kilómetros al oeste de la capital de Guatemala. Es propietaria de B’Shine, un emprendimiento que, en sus palabras, ofrece “joyas de lujo que dan prestigio a quien las compre, con precios al alcance de cualquier bolsillo”.

Belén explica que B’Shine fue creada hace cuatro años como una forma de autoempleo, después de varios años de búsqueda infructuosa de trabajo formal. El reto no ha sido fácil; las limitaciones que implica impulsar un emprendimiento con poco capital y desconocimiento de temas financieros, se sumaron a las barreas sociales y físicas que diariamente enfrenta debido a su condición de discapacidad.

Este pequeño negocio recibió capital semilla del proyecto SOL (Sembrando Oportunidades Locales), financiado por el Ministerio de Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) de Alemania, a través de ASB América Latina; e implementado por Ayuda en Acción en El Salvador, Guatemala y Honduras, junto al Instituto Salvadoreño del Migrante (INSAMI); Pastoral de Movilidad Humana de Guatemala y el Organismo Cristiano para el Desarrollo Integral de Honduras (OCDIH).

El proyecto SOL se implementa en 12 municipios del trifinio del Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras – Guatemala – El Salvador), con el propósito de contribuir a la disminución de la migración mediante la creación de nuevas perspectivas de permanencia tales como generación de empleo digno, creación de emprendimientos, formación ocupacional y cultura de paz.

Belén explica que recibió capital semilla en dos ocasiones; la primera, de materia prima para dotar a su emprendimiento; y en la segunda ocasión, obtuvo 3,000 quetzales (380 dólares aproximadamente) para invertir en infraestructura.

“He invertido mi capital semilla para impulsar mi emprendimiento pero cualquier capacitación o apoyo en formación para emprendimientos es bienvenida. Me interesa todo aquello que sea fortalecimiento en aspectos administrativos y financieros”.

Belén también es promotora de derechos humanos de las personas con discapacidad en Chiquimula y forma parte de la Comisión Departamental para Personas con Discapacidad, espacio público de incidencia para la creación de oportunidades laborales para personas con discapacidad. Belén también representó a su departamento en el certamen de belleza inclusiva Miss Wheelchair Guatemala en 2019.

Aunque el emprendimiento todavía no garantiza la independencia económica de Belén, esta emprendedora mantiene su meta: “Mi aspiración es crear empleo para personas con discapacidad”, comenta.

En cuanto a los emprendimientos, a diciembre 2022, el programa SOL ha entregado el capital semilla a 53 emprendimientos (11 en Honduras, 14 en El Salvador y 28 en Guatemala). En el transcurso de 2023, se ha entregado capital semilla en Honduras y El Salvador. A la fecha, se han creado 130 puestos de autoempleo y se brinda asesoría técnica y seguimiento a los emprendimientos creados.

En Guatemala, Honduras y El Salvador, respectivamente el 93%, el 100% y el 50% de los emprendimientos apoyados son iniciativas de jóvenes y mujeres., como el de Belén.